[ Veinte & Tres ]

Cuentame ahora, que has hecho anoche?
Pensaste en mi?
Te has malgastado deseandome?
Y prometimos no querernos, por temor a esto...
A esta vida que ahora nos hemos brindado, falta de todo y tan superficial.
Una vida como tu y yo, y tantos mas la han querido; solo que esta vez la encontramos
quince años despues de habernos conocido.
Sigo pensandote en la orilla de este mundo, sigo llorandote por no tener tus brazos.
Cuando las pestañas me pesan, y es que no puedo soñar; porque sigo cargando tu recuerdo;
Como si fueran los huesos de mis padres.
Y ya no aguanto.
Ya no puedo mirarme al espejo, y decir que no existes.
No puedo decir que soy un sueño, y tu la fantasia que lo acompaña.
Si fuera tan facil borrar tu recuerdo, igual que desear esos labios asesinos.
Cuentame ahora, en que pensabas mientras me hacias el amor?
Me besas hasta la sombra, me besas los ojos.
Delineando mis labios, tus manos tibias...haciendome sudar.
Pareces pintarme entre sabanas, y almohadas.
Aqui, donde la pintura era tu boca; y yo simplemente arte...
Arte en tus labios.
Cuentame ahora, cuando me tomas de las manos;
Desnudo, paciente...me has vuelto a estremecer...
Si tomas mis pechos en tus manos, cuando has probado un poco de la gloria;
La gloria que espera.
Haciendome mas pequeña cada vez bajo tu cuerpo,
Clavandote las uñas en la espalda;
En tu espalda donde tanto tu sudor como el mio, y se ha vuelto uno,
donde florecen nuestros frutos.
Entre miradas, y temores...
Temblores, y demoras nos hemos hablado al oscurecer;
Al compartir palabras entre cortadas, de exhaustacion; de deseo mutuo y desenfrenado.
Yo no se porque, ni quisiera saberlo; cuando me estas clavando esas miradas
De corazon herido.
Suelta esas riendas que tanto te atan, ven por mi...
Que voy por ti.
Que aqui te espero, Y aunque tu diras lo mismo,
Frente a mi ventana de sueños, bajo truenos y relampagos;
Submergiendome en un sueño eterno, del que si no me despiertas,
Terminaras por quedarte sin este deseo del que tanto quisieras deshacerte.
Tomame en tus brazos, hagamoslo en el piso...
En el pasillo, entre escalones.
En el techo, y a plena vista ajena.
Hagamoslo donde desees, pero no te limites,
Ni limites a que yo te quiera.
No, no me limites a que no pueda llamarte;
No me limites a que tenga que esperar paciente,
Hasta que decidas tocarme; Cuando hace quince años atras te lo estoy pidiendo.